Tres cosas hay en la vida: salud, dinero y amor. Smol Tosi decidió imponer su propio orden de prioridades y empezó por el amor con un primer álbum, ‘Love &…’, en el que puso, literalmente, todo su corazón, ¿te acuerdas de la portada? Ahora, a casi un año de que el euro llegue a nuestras manos, es el turno del dinero, y el sosias junglista de Big Toxic regresa con ‘Moneyland’. Como sugiere la portada, hoy el dinero no viaja en maletas, sino que se transforma en ceros y unos para pasar de una base de datos a otra a través de una red que no tiene por qué ser ‘la de redes’. De igual manera, la música de ‘Moneyland’ es en origen un conjunto de señales eléctricas que la experta mano programadora de Big Toxic ha convertido en una sacudida implacable de ritmos entrelazados para que te marques los pasos más duros (sí, hardstep) de la pista. El disco está dividido en tres bloques de temas unidos entre sí para emular una sesión de DJ, de lejos la mejor manera de disfrutar esta música en todo su esplendor. La introducción con inquietantes cuerdas de ‘Mongo Mode’ nos va poniendo en situación hasta que surgen de la nada las percusiones sinuosas y los golpes de bajo. A partir de ahí, es todo un subir de intensidades rítmicas y valles de breve calma electrónica desde los que tomar impulso para un nuevo asalto. ‘Ultra Hub’ parece que nos va a dejar agotados desde el principio, pero eso no es nada para la que te espera cuando llegues a la violenta economía de ‘Red Devil’ o ‘Electric Tango’; aunque siempre encontrarás también algún patrón melódico al que agarrarte entre tanta velocidad, caso de los riffs tubulares de ‘Letsirk’ o los orquestales de la pegadiza ‘Moneyland’ ¿Y la salud? Bueno, si el tercer disco trata de otra cosa dará igual: ya sabemos que Tosi/Toxic está plena forma.